Si, como dice Chick Corea, la ciudad es un magneto, entonces nosotros no somos más que cargas eléctricas trashumantes, pequeños receptores-transmisores que vagamos a la caza de información, la procesamos y la irradiamos...
Somos entonces radiotransmisores humanos.
Y si así fuese, ¿Cuál sería nuestra banda de sonido? ¿soñaríamos también con ovejas eléctricas, como los robots de Phillip K. Dick?
Johannes Enders, músico y productor alemán tiene una respuesta, y desde hace poco mas de diez años manifiesta sus postulados en los discos de su proyecto Enders Room. NuJazz, Electrónica, Roots & Bytes en una combinación sofisticada
La perfecta banda de sonido para humanos radiofáricos...
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