Ramiro González Garza, joven saxofonista mexicano, Ha compuesto la música de su disco más reciente desde el dolor y la pérdida. El resultado no es una música sombría, sino todo lo contrario. Y es que a partir de una experiencia terrible pareciera que el alma se reconforta a través del sonido. Surge así la Sonata para el bebé Colibrí que es también el título del segundo disco como líder de este joven jazzista nacido en Tamaulipas.
Discos conceptuales en el jazz mexicano son muy raros y este viene a rebosar ese hueco. Hay aquí sonoridades de vanguardia y experimentación libre, hermosas melodías y raíces de la música folclórica de nuestro país. Ramiro consigue nuevamente un disco redondo y esta vez con un componente emocional muy profundo. Desde el dolor y la oscuridad un poquito de luz... mucha luz.
Que lo disfruten.
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