Entre 1996 y 1997 el pianista norteamericano Keith Jarrett
contrajo una extraña enfermedad: el síndrome de fatiga crónica, una afección
muy difícil de diagnosticar —y que no se acaba de entender por completo. A
pesar de tratarse de un problema físico, también tiene componentes
psicológicos. Esto significa que una persona con síndrome de fatiga crónica
puede presentar síntomas físicos, pero puede presentar también síntomas
emocionales, como pérdida de interés en sus actividades favoritas.Con este
terrible cuadro que incluyó una profunda depresión, Keith estuvo un año
postrado, con terribles dolores en las articulaciones que le impedían, incluso,
tomar un libro para entretener el ocio al que había sido condenado. Entonces
sobrevino un año sabático de silencio obligatorio.
Poco a poco la enfermedad fue cediendo y el pianista
encontró la energía suficiente para probarse en el escenario junto a sus
compañeros del afamado Standards Trio, Gary Peacock al contrabajo y Jack
DeJohnette a la batería. El concierto, celebrado en noviembre de 1998, fue
grabado en una cinta DAT y ahora ve la luz gracias a una espléndida edición de
ECM Records bajo el apropiado título de After the Fall (Tras la caída).
La revisión de este material nos permite reencontrarnos con el espíritu imbatible de un creador que renació para seguir prodigando su arte.
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